Los 3 secretos que guarda la elaboración de las riquísimas galletitas Oreo
¡Me dieron ganas de comer unas!
¿A quién no le encantan las galletitas Oreo? Son riquísimas, ideales para acompañar con un vaso de leche fría, y se nos hace agua la boca con tan solo ver un paquete.
Se cuenta que, cuando las primeras Oreo salieron, estaban en un recipiente de metal con tapa de vidrio, y se vendieron por 30 centavos por libra a un vendedor en Hoboken, N.J. Después de haber transcurrido aproximadamente un siglo, la Compañía Nacional de Hornear, que luego fue llamada Nabisco, introdujo nuevos sabores, estilos y tamaños.
A continuación, les revelamos tres de los secretos mejores guardados de las galletitas Oreo:
- Son más adictivas que la cocaína
Los investigadores afirman que las galletitas Oreo tienden a hacer adictivas como la cocaína. Un grupo de estudiantes experimentó con ratas y su estudio arrojó que la Oreo estimuló los centros de placer del cerebro de los roedores, como si les hubiesen sumistrado cocaína.
- Fueron parte de un trio de nuevos ofrecimientos, pero las únicas en hacerse populares
El 2 de abril del año 1912, circuló un memorándum interno de Nabisco notificando la nueva publicación de Oreo Mother Goose Biscuits, Veronese Biscuits y Biscuits, las cuales serían tres variedades de galletas de primera calidad que irían envasadas con un nuevo estilo. Sin embargo, las Oreo fueron las únicas en hacerse populares.
- Sus proporciones son exactas
Uno de los secretos más importantes de las Oreo, consiste en colocar los ingredientes exactos: 71% galleta de chocolate y 29% crema.